SAINT GERMAIN 3 de abril de 2013

SAINT GERMAIN

3 de abril de 2013

¡Tenéis un Corazón que es el Fuego y Consciencia de vuestra Magna Presencia YO SOY! ¡Vuestra Presencia está muy, muy cerca para producir el cambio que requerís! ¡Habéis oído decir repetidamente que “¡Lo que Dios quiere hacer por vosotros, Él lo hace por intermedio de vosotros!” ¡Y de dónde creéis que viene esa ‘intermediación’? ¡Directamente de la Llama Trina del Corazón! Por eso es que constantemente os recordamos que debéis expandir esa Llama, exhalar sobre ella el Amor a Dios que es llevado y elevado hacia los brazos expectantes de vuestro Cuerpo Electrónico personal. Y entonces, ¡debéis ver los Rayos de vuestro Cuerpo Electrónico proyectados hacia afuera y (saber) que vuestra Magna Presencia YO SOY pone todos vuestros vehículos en movimiento con la velocidad del relámpago cuando hay una crisis en vuestra vida, una necesidad de la Ley que debe ser ejecutada, cuando hay un Propósito Divino y Sagrado que debéis cumplir! Todo eso porque habéis preparado el Cáliz del Ser y permitido que la Llama exista.

Sin embargo, esta intercesión por parte de vuestra Presencia requiere el uso de la Llama Violeta, que es el Amor de vuestra Presencia amándoos. Amándoos lo suficiente para remover todo lo que se atraviese entre vosotros y un Dios amoroso, para que logréis convertir ese Amor en una realidad. Sin embargo, eso requiere de vosotros tener una constitución de fuego, una constitución que permita eliminar esas cosas. ¡Oh, a principio podrá parecer que han arrancado una parte de vosotros! Pero, benditos corazones, esa es la divina cirugía del Rayo Rubí, que penetra esas áreas de irrealidad para consumir todo lo que sea distinto de la Perfección de vuestra propia Presencia Divina.

¿Y qué queda entonces en vosotros? No un vacío — no una mente ausente ni una vacuidad de auténtico ser. Instantáneamente, cuando la Llama Violeta termina su Obra Perfecta, aparece esa vitalidad renovada en vuestros vehículos externos que os permite enderezar la espalda y sentir orgullo de vosotros mismos; sentís circular la corriente de Dios-Amor por encima, adentro y alrededor de vosotros. ¡Y podríais jurar que ya atravesasteis la transición hacia las Octavas Internas de Luz! Pero, en realidad, es que acabáis de despertar hacia la Verdad de vuestra Identidad en Dios. Y esa Verdad no retrocede ni se deja marchitar ni fallecer. Cuando la habéis experimentado, ¡os aferráis a ella! Y permitis que siga impulsándoos hacia adelante — en expansión.

Esta Verdad de la Identidad Divina tiene muchos niveles, que os serán revelados como siempre ha sido el caso. No fue ayer que la Presencia empezó a trabajar con vosotros. Y cuando empezáis a utilizar esa percepción consciente de la Presencia activa en vuestra vida, es como si hubieseis llegado a vuestra casa; porque es muy familiar - mucho más familiar que la irrealidad que habéis creado durante muchas encarnaciones y que está alojada en el cuerpo de la memoria. No, benditos corazones, esta es la Divina Memoria de un Dios que desea elevaros, remover todo lo que se interpone entre vosotros y la Mente de Dios, que es capaz de definir vuestro rumbo.

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