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“LA PUERTA ABIERTA HACIA LA PRESENCIA DE DIOS” : ARCANGELINA AURORA

AMADA ARCANGELINA AURORA

Diosa del Amanecer. Arcangelina del Sexto Rayo

(Servicio y Ministración)

Complemento Divino del Amado Arcángel Uriel

4 de noviembre de 2004. Tucson, Arizona, U.S.A. 


“LA PUERTA ABIERTA HACIA LA PRESENCIA DE DIOS”

(Parte 4 de 4)


(…) No basta con sentir la satisfacción de ser una buena persona, aunque eso es importante. No basta con pensar en cosas que os gustaría hacer, que estarían alineadas con la Benevolencia de Dios. No basta con que tejáis una linda prenda de vestir o que uséis las manos para establecer un momentum agradable para quién lo recibe. Todas esas cosas son indisputablemente benignas. Ellas fueron alimentadas por algún elemento en vuestra corriente de vida que deseaba algo de bueno. Pero si están desprovistas del Amor de Dios, de vuestra propia Llama del Corazón que infunde esas boas obras, estableciendo momentums de sacralidad que fomentan la Divina Naturaleza de cada una de estas realizaciones que hacen fructificar la manifestación de Dios en la vida, entonces, benditos, ¡(es porque) aún estáis dando los primeros pasos de una tarea muy elemental a favor de vuestra Presencia Divina!


Hay mucha gente en esta tierra, a grandes distancias, que está viviendo esa circunstancia. (Aún) no ha habido un ímpetu en el Altar de sus Corazones — dadas las circunstancias kármicas de su vida — que les permitiría la oportunidad de liberarse de las circunstancias humanas tan abundantes a su alrededor y de despejar el camino hacia la Consciencia superior de su propia Santa Presencia Crística, para tener el Hilo-de-Contacto estampado tan intensamente en el primer plano de su consciencia que captan la Dirección Divina para su corriente de vida.


Muchas veces esa Dirección es establecida y puesta en práctica por la labor que les ofrecen los Ángeles. Y es realmente un gran Servicio. Sí, porque sin el Servicio de los Ángeles, muchos se perderían durante eras enteras hasta tener la oportunidad de ascender a una vibración que les permitiría abrazar más de la Presencia de su propio y Magno YO SOY.


Así, reflexionando sobre vuestra vida, ¡considerad las Bendiciones que habéis recibido y el despertar de la Llama de vuestro Corazón hacia la pasión de Dios! Y cuando ese Amor arda con gran fulgor, dejad que os aporte todo lo que estáis destinados a ejecutar en esta encarnación, ya sea que haya encarnaciones adicionales por delante o que la aceleración os conduzca a la Ascensión en la Luz.


La Presencia conoce el día de vuestra Ascensión; conoce la Oportunidad que recibís. ¿Estáis listos para ese día? ¿Habréis terminado de hacer todas las buenas obras que vuestra Presencia deseó? ¿Tendréis Llama Violeta suficiente para consumir el karma, el residuo de percepciones incorrectas y prejuicios que aún existan en los pliegues de vuestro traje? ¿O será que os quedaréis atrás esperando, esperando y esperando?


Estas son opciones que, por libre albedrío, se abren a los Hijos e Hijas de Dios y, muy especialmente, a los que tienen el Pleno Conocimiento de su Magna Presencia YO SOY, ¡sabiendo que son más que simples seres humanos, sino Hijos e Hijas de Dios! Ellos tienen el Pleno Manto y Autoridad de recurrir al Señor, de invocar el Nombre de Dios, I AM (YO SOY), y de asumir el mando de su vida! Al hacerlo, participan en la Dicha del Amor Divino. Ese Amor Divino se convierte en el combustible que permite que la Llama Divina en su Plenitud y las Llamas Gemelas confluyan y se unan.


¡Eso permite que el Plan Divino personal sea iniciado y alcanzado victoriosamente! ¡Permite que los pasos finales del ciclo personal de encarnaciones humanas en la Tierra coincidan con la Voluntad de Dios para llevarlos hacia la Ascensión en la Luz!


Mi Amada y Yo, con nuestros Ángeles, estamos listos para ayudaros en todas las fases de la fructificación de vuestra vida — para nutriros, enseñaros guiaros y dirigiros. Pero, aún más importante, os miramos a vosotros con la Plenitud de nuestra Visión Divina de quienes realmente sois — la Presencia de Dios encarnada con la Luz resplandeciendo en toda su Gloria en el Altar de vuestro Corazón, tejiendo la Tela de la Vida que vuestra Presencia tanto ha deseado.

¡Que esa Luz, benditos, resplandezca y traiga el amanecer del nuevo día que requerís y que todos deseáis! ¡Que la Plenitud del Sol-Detrás–del-Sol resplandezca en toda su Gloria a medida que la aurora de la Edad de Oro se asegura en vuestro Corazón y empezáis a usar ese Manto de la Cristicidad como vuestra legítima herencia — ¡poniendo a un lado las niñerías, descartando las áreas de vuestra conciencia que os han estado limitando hace demasiado tiempo, y abrazando la expansión de la oportunidad que se os concede, aquí y ahora!


¡Adelante! Y verted la Consciencia de Dios, ¡ministrando a todos los que desean conocer a Dios y estar en la Gloria de Dios! ¡Que el Amor de Dios florezca en la nación, y que la Plenitud de ese Amor sea realizada dentro del núcleo del Corazón de cada uno!


¡Preparad la consciencia de los Hijos e Hijas de Dios que son Portadores de la Antorcha del Templo para entrar en un nuevo ciclo de toma de consciencia del Amor Divino que será presentado durante el próximo Conclave! ¡Y que la Mano de Dios os motive a prestar atención a cada palabra, a cada ergio de energía, a cada Rayo emergente de Consciencia Divina y de Momentum de los Maestros Ascendidos! ¡Yo, Aurora, lo estoy proclamando hoy! Y ordeno que la Luz de Dios sea establecida como Amor Divino para el próximo ciclo!”

Arcangelina Aurora


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