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“¡La Llama Violeta es la Clave para Vuestra Victoria! “ : Saint Germain

AMADO SAINT GERMAIN

Chohan del Séptimo Rayo

3 de abril de 2013


“¡La Llama Violeta es la Clave para Vuestra Victoria! “ (1ª Parte)


¡Benditos Corazones! ¡Todo está listo y preparado en el Cosmos, para revelaros todo lo que requiráis para ser Victoriosos en Dios! Para asumir vuestro puesto, donde quiera que sea, y para establecer un Pilar de Fuego, un testimonio sobre la Ley Cósmica y un testimonio sobre el Amor de Dios que habéis llegado a conocer, o que seguro descubriréis por vosotros mismos a corto plazo como ese Glorioso Latido del Corazón de Dios que está en el centro de todo lo que hacéis, todo aquello cuya manifestación decretáis, todo lo que deseáis realizar, manifestar como Victoria, todo el Logro que sois llamados a poner en práctica por vuestra propia Presencia Divina! ¡Porque finalmente, la Presencia personal sabe exactamente lo que sois capaces de realizar — mucho mejor que los vehículos externos!


Los vehículos externos frecuentemente son tacaños con la Luz de Dios, demasiado reservados o, desde la otra cara de la moneda, excesivamente egoístas, y no tienen en el centro de su ser el equilibrio que permite (ejercer) la presión exacta de Luz, ¡la consciencia exacta que activa y vivifica lo que empieza a exteriorizarse, lo que sois llamados a manifestar!


Toda la vida es una serie de manifestaciones que os presenta la Presencia con todo el cuidado — ¡para traer el talento, entrenamiento, enseñanza, claridad! Y cuando estos vehículos empiezan a comprender su verdadero papel como vehículos del Templo de vuestra Presencia Divina personal, entonces, benditos, ¡podéis empezar a sentir, en el cuerpo emocional, la expansión de la Consciencia de la Mente de Dios llenando el fuelle de vuestro cuerpo emocional con una Carga de Luz necesaria para mantener la consciencia de la mente elevada en esa Mente de Dios, ¡y para permitir que esa Mente Superior induzca el vehículo físico a moverse al ritmo de cada tonalidad que la Mente de Dios desea completar!


Esto es verdad para todos los aspectos de la vida, sin importar si estáis o no conscientes (de ello). Incluso en este vehículo físico donde transcurre el proceso involuntario para el más denso de vuestros cuerpos, ¡la Mano de Dios está actuando y llenando el doble etérico de las porciones más sutiles de ese cuerpo físico para que pueda haber, en el vehículo externo, salud y bienestar, fortaleza y vigor! Esto para que, mientras la Luz de Dios recurre cada uno de estos vehículos, haya la habilidad para irradiar Luz, Consciencia, Fuego, Voluntad Divina, y para actuar, entonces, en el flujo de todo lo que la precedió, procedente de la Magna Presencia YO SOY, para producir su Perfección en ese preciso instante.


¿Ahora bien, cómo funciona esto? Primero y más importante que todo, es necesario invocar y canalizar suficiente Llama Violeta hacia estos vehículos, en donde visualizáis esa Llama Violeta penetrando, atravesando y envolviendo todos los planos de la consciencia en estos reinos inferiores, es decir, cada uno de los sub-planos — hasta las mismas células de vuestro cuerpo físico, la corriente sanguínea, los pulmones — purificando todos los aspectos del cuerpo físico. Visualizadla llenando todo el cuerpo emocional, y después el cuerpo mental y el cuerpo de la memoria hasta que quede solamente — tras vuestro tratamiento con la Llama Violeta — un cáliz cristalino de cada uno de los respectivos planos de la consciencia, ¡permitiendo que la Mano de Dios se mueva y tenga su Existencia por vuestro intermedio!


¿Qué es necesario para que los estudiantes de la Luz deseen dar (invocar) la Llama Violeta? ¡En realidad, con frecuencia no hay (en ellos) una comprensión real, experimentada del beneficio recibido! Seguramente habéis oído mi instrucción, que no es una mera repetición de mensajes anteriores. Pero aquí y ahora mismo, ¡estoy delante de vosotros para proclamar que la Llama Violeta es la clave más importante para que establezcáis vuestra Victoria! Porque sin ella no hay el Cáliz transparente del Ser que permite contemplar la Presencia de Dios. ¡Oh, tal vez penséis que no hace falta! Que, de alguna manera, vais a poder circular por la periferia de la vida sin dejaros contaminar por el retorno de vuestro propio karma, o incluso del karma de los últimos momentos de vuestro día. Pero, benditos corazones, en algún momento el karma os alcanzará. Y lo miraréis de frente, y él lanzará un reto. ¡Sacudirá el puño en vuestra dirección! ¡Cogerá vuestros vehículos externos por los cabellos y os apretará la garganta con su puño para erradicar de la percepción consciente todo y cualquier vestigio de deseo, incluso el de dar los Decretos de Llama Violeta, de elevar vuestra mirada a la Magna Presencia YO SOY, de tan perseverante que es la irrealidad!


Benditos corazones, se os ha dado, entonces, la oportunidad para reconocer la diferencia. Seguro que lo más razonable sería preferir la Llama Violeta al puño sofocante de la irrealidad controlando vuestra vida, creando aún más dificultades para avanzar en la vida, para a duras penas conseguir un parco sustento, para navegar relaciones disfuncionales, para carecer de todo lo que tiene valor duradero en la vida -- (todo eso) a causa de la grande falta de Presencia inmediata de Dios en vuestra vida, ¡una Presencia que es necesaria para poder reportar a vuestros vehículos externos que todo va bien y que estáis verdaderamente en seguridad!

La Llama Violeta, benditos corazones, no removerá las pruebas e iniciaciones por las que tendréis que pasar, pero ella resulta esencial para barrer toda la discordia interior que necesita ser eliminada, ¡para permitir que la Luz de la Presencia penetre en vuestro ser de tal manera que podáis pasar esas pruebas e iniciaciones!


Si observáis que estáis continuamente luchando para superar, atravesar o sobrepasar de una vez por todas un determinado obstáculo que os viene afligiendo desde los confines de la memoria, (¿pregunto si) alguna vez os sentasteis con la atención concentrada en esa sustancia oscurecida, sea cual sea, y permitisteis a los dedos de la Mente de vuestra Presencia Crística personal dirigir la Llama Violeta hacia la causa, efecto, registro y memoria de esa área tullida de vuestra vida? ¿Habéis seguido con vuestra aplicación hasta terminar la transmutación deseada? Y si esa transmutación os parece demasiado difícil para aceptar que tenéis, en vuestro interior y en vuestra Magna Presencia YO SOY, la habilidad para alcanzar ese logro y maestría a través de vuestra aplicación personal de la Llama Violeta — ¡entonces podéis invocarme! ¡Porque nunca estoy tan atareado que no pueda hablar sobre el sabio uso de la Llama Violeta por cualquier estudiante de la Luz! Sin embargo, ¡aseguraos de que queréis realmente mi intervención! ¡Porque es posible que no estéis preparados para seguir sentados durante todo el tiempo que mi intercesión y mis instrucciones puedan requerir! ¡Descubriréis, sin embargo, que todo el proceso resulta muy facilitado cuando renunciáis a esa circunstancia indeseable y la entregáis a vuestra Presencia, de una vez por todas!


Cuando Yo vengo a este Altar, tenéis la oportunidad de renunciar a todo lo que os habéis permitido mantener en vuestras vidas (y) que requiere ser lanzado en la Llama — todas las circunstancias limitadas, todas las energías recalcitrantes y rebeldes del ego humano. Cuando la corriente de mi Instrucción llega a vuestros oídos, mis palabras no son la única comunicación que estáis recibiendo de mi Llama durante el mensaje que transmito. Vuestros vehículos externos están sintiendo el toque de la Consciencia de Dios como Amor — de la Presencia que os ama inconmensurablemente — ¡un Amor más que suficiente para penetrar ese pozo de irrealidad y negatividad que ha manchado vuestro mundo, contactándolo con la Llama Violeta y consumiéndolo instantáneamente! ¡(Esto es) para que no os vuelva a afligir ninguno de los males que os habéis permitido conservar! No importa de qué tipo de irrealidad se trate — si son los poderes psíquicos o los chismes, los temores, las impurezas, las leves antipatías, los odios — ¡hasta la misma ausencia de suficiente amor hacia Dios en vuestro corazón para poder percibir que Yo, Saint Germain, os amo como (realmente) amo! No amo vuestra creación humana. Amo la Llama que sois — ¡esa Presencia única, con su Intención Divina y el Propósito que debe ser cumplido! (…)


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