CARTA DE NAVIDAD DE EL MORYA
- Hernando
- 24 dic 2019
- 4 Min. de lectura
CARTA DE NAVIDAD DE EL MORYA
16 de diciembre 2019
Benditos Corazones,
¡Mi más tierno deseo es que experimentéis la plenitud de esta Temporada Navideña en la Luz de vuestra Magna Presencia I AM (YO SOY), recurriendo a toda la Luz transmitida por el Momentum del Espíritu Conjunto de la Hermandad de Luz para ayudaros a alcanzar ese pináculo de la Consciencia de vuestra Presencia personal, la cual expande vuestra Maestría e Realización Espiritual y os da la más plena expresión de la Luz Crística que podéis traer a manifestación.
Si, entiendo que hay siempre muchos retos, iniciaciones y responsabilidades que os toca enfrentar. Sin embargo, especialmente durante este ciclo de Navidad es necesario que separéis el tiempo (requerido) para el trabajo espiritual – el trabajo que os permite tener la Paz y Armonía necesarios para que seáis bañados en Luz por los Santos Ángeles de la Temporada de Navidad, para que entréis en la Corriente del Río de Llama Violeta, invocando la bendición transmutadora que ella trae (en su estela), de manera que podáis entrar en el Nuevo Año libres de todo lo que es el pasado y que, por el contrario, lo hagáis llenos de la Esperanza de todas las Realizaciones adicionales que ha de traer el Nuevo Año para que las ejecutéis en la Luz del Cristo.
Siempre van a estar presentes esas exigencias mundanas (presionando) vuestra vida, insistiendo en que tenéis que ponerles atención, con el riesgo de hacer que os apartéis de la Consciencia galvanizada y del Portentoso Momentum de Luz que la Presencia desea para vosotros durante este ciclo. Entendiéndolo como estudiantes de la Luz y como discípulos en el Sendero de la Ascensión personal, os toca reclutar hasta el último ergio de energía, dirigiendo vuestra mirada hacia la Luz de la Presencia, abrazando la Plenitud de la Estrella Secreta del Amor, de Lux Invictus y de la Estrella de Belén, que resplandecen para recordaros que vuestra Cristicidad está cada vez más cercana - que está naciendo hoy mismo.
Porque en efecto, benditos, a cada día recibís la oportunidad de llevar en vosotros la Luz de la Magna Presencia I AM que arde en el Altar de vuestro Corazón; de derramar esa Luz como creatividad y como Momentum Espiritual que permite a vuestra Presencia involucrarse en la vida, en la creatividad y en el Momentum del Cuerpo Causal que sois llamados a alcanzar durante esta encarnación.
Pensad bien en el ejemplo que dio un Hijo de Dios – Jesús, en este caso específico – que aparece la tierra y que, pasado poco tiempo, hace su Ascensión en la Luz. Es cierto que él había tenido encarnaciones anteriores que lo dejaron preparado para una hazaña tan prestigiosa en su plena juventud. ¡Pero vosotros también tenéis la Oportunidad! ¿La habéis aprovechado bien? ¿Os habéis involucrado en la Luz de vuestra Presencia para establecer los Momentums de Bien Divino que quedarán guardados en vuestro Cuerpo Causal? Claro que eso lo sabe vuestra Presencia mejor que nadie. Porque vosotros a menudo no lográis percibir, en vuestra consciencia externa, lo gloriosas que han sido esas ocasiones del pasado, las buenas obras, la Realización Espiritual y la Maestría que ya habéis alcanzado.
Reconociendo el hecho de que no estáis solos y de que, en el momento apropiado - de acuerdo con lo que establezca por vuestra Presencia personal – y, de igual manera, con vuestra habilidad para aprender a responder a vuestra Presencia, ¡trazaréis el mapa de vuestro destino hasta que lleguéis a la Ascensión. ¡Qué día tan glorioso! Y mientras estéis atravesando el ciclo en el que os toca centrar la atención en la Magna Presencia I AM, considerad cada día como un entrenamiento para aprender a lanzar en la Llama todo el karma del pasado, los conceptos erróneos sobre la vida, los actos que no están a la altura del alto padrón del Cristo, e introduciendo entonces las mejorías correspondientes en vuestro comportamiento, invocando la Luz para que transmute (esos registros), y permitiendo finalmente que la Luz os oriente, proteja e dirija hacia un ascenso más directo y acelerado a vuestra Cristicidad y, en última instancia, a vuestra Ascensión en la Luz.
¡Oh, cómo quisiera Yo tomar a cada uno de vosotros de la mano a cada momento de cada día, para ayudaros a transponer lo que, para algunos, son obstáculos muy difíciles en su senda. Hay otros que, por estar más cerca de su Ascensión, consideran que ese desafío es quizás un poco menos difícil. ¡Pero, ojo! Siempre tenéis oportunidades para pasar una iniciación final a la que posiblemente no anticipabais. ¡No bajéis la guardia, por muy fácil que el Sendero pueda pareceros en este momento.
¡Que recibáis la Luz que estamos ofreciendo a vuestros vehículos de la consciencia y permitáis que su plena aceleración os transporte y eleve a la vida que estáis destinados a vivir es lo que os deseo durante esta Temporada Navideña! Porque, benditos, ¡el Amor de mi Corazón por vosotros es grande! E incluso cuando sois trasladados a otros Retiros para iros a estudiar con otro u otros de los Chohanes, sabed que estoy siempre cercano dentro del Corazón de la Presencia, y que siempre podéis contar conmigo a vuestro lado si hacéis el llamado.
¡Que la Luz y el Momentum de mi Amor os transporten rápidamente a la Plenitud de vuestra Victoria! ¡Toda la Gloria a la Luz del Cristo que portáis!
Con Devoción,
I AM (YO SOY) El Morya
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